Introducción

El queso es uno de los ingredientes más utilizados y sabrosos del mundo culinario. Y aunque es delicioso, también puede ser muy pesado en nuestra dieta. Por suerte, hay algunos trucos que puedes seguir para poder disfrutar del sabor del queso sin afectar tu dieta. En este artículo te enseñaremos los mejores trucos para conseguirlo.

El queso y la dieta

Es cierto que el queso es rico en proteínas, calcio y nutrientes beneficiosos para la salud. No obstante, también es alto en grasas y calorías. Esto significa que es fácil comer en exceso y afectar tu dieta diaria. Para evitar esto, debes tener cuidado con los tipos de queso que consumes y la cantidad que comes.

Tipos de queso

No todos los quesos son iguales. Algunos son más saludables que otros y contienen menos grasas y calorías. Aquí te dejamos una lista de los tipos de queso más saludables:

• Queso fresco: es bajo en grasas y calorías, y alto en proteínas.
• Queso de cabra: tiene menos calorías y grasas que otros tipos de queso.
• Queso feta: es bajo en grasas y calorías, y también es una buena fuente de calcio.

Cantidad de queso

La cantidad de queso que consumes también es importante. Una porción adecuada de queso es de una onza (28 gramos) o menos. Si quieres disfrutar del sabor del queso sin afectar tu dieta, debes prestar atención a las porciones que consumes:

• Lee las etiquetas de los quesos y fíjate en la cantidad que se considera una porción.
• No añadas grandes cantidades de queso a tus preparaciones. Una pizca es suficiente para conseguir el sabor deseado.
• Cuando te sirvas queso, asegúrate de usar una báscula de cocina para medir la cantidad correcta.

Sustituye el queso por otros ingredientes

En lugar de añadir grandes cantidades de queso a tus preparaciones, puedes probar a sustituir el queso por otros ingredientes que tengan menos calorías y grasas:

• Utiliza aguacate en rodajas en lugar de queso en tu ensalada.
• Prueba la levadura nutricional para dar sabor a la pasta o a las patatas.
• Cambia el queso crema por hummus en tus sándwiches.

Elige quesos bajos en grasas

Si no puedes vivir sin queso, puedes optar por quesos bajos en grasas:

• El queso ricotta es bajo en grasas y calorías, y puede ser un sustituto perfecto para otros tipos de queso.
• Otra opción es el queso de cabra, que es bajo en grasas y calorías.

Limita la cantidad de queso que consumes

Para disfrutar del sabor del queso sin afectar tu dieta, es importante que limites la cantidad que consumes:

• No te excedas de la cantidad recomendada.
• Opta por quesos más fuertes y con más sabor en lugar de quesos más suaves y grasos.
• Usa una pequeña cantidad de queso rallado en lugar de una loncha entera.

Controla tus antojos de queso

Si eres un amante del queso, es posible que sientas antojos constantes. Aquí te dejamos algunos consejos para controlar tus antojos:

• Prueba un queso fuerte en lugar de un queso suave.
• Bebe un vaso de agua antes de comer queso para llenarte y reducir tu apetito.
• Busca alternativas saludables, como frutos secos, para satisfacer tus antojos de alimentos salados.

Conclusión

Sabemos lo delicioso que es el queso, pero también sabemos lo fácil que es comer en exceso y afectar tu dieta. Siguiendo estos trucos y usando moderación en tu ingesta de queso, podrás disfrutar del sabor del queso sin afectar tu dieta. Así que, ¡disfruta de tu queso favorito de manera inteligente!